Cómo conservar el té adecuadamente

Antonella Grandinetti
Antonella Grandinetti
Cómo conservar el té adecuadamente

Una de las preguntas más habituales que todos los teteros nos hacemos es qué caducidad tiene el té y cómo hacer para conservarlo adecuadamente. Hay muchas teorías circulando por Internet, pero ¿cuál de ellas es cierta?

El sabor del té que bebemos no solamente está relacionado con la calidad de lo que compremos, sinó, por supuesto por cómo lo usamos y conservamos. Así que no lo dudes y continúa leyendo. ¡Te lo explicamos todo!

¿El té caduca?

El té es un producto con un tiempo de vida largo. Cabe recordar que el secado es un proceso de conservación natural.

Más que de fecha de caducidad, en el caso del té debe hablarse de fecha de consumo preferente. Recordemos que la fecha de caducidad se refiere a los productos que pueden tener un riesgo microbiológico si se consumen después de un determinado momento, cosa que no debería ser el caso del té.

Si la conservación es adecuada, esto no sucede, ya que no se desarrollan bacterias ni gérmenes ni se pudre. Lo único que sucede con el té, y que lleva a la necesidad de plantear una fecha de consumo preferente, es que cambia.

Con el paso del tiempo y dependiendo de los cuidados tomados a la hora de conservarlo, el té verá afectadas sus características organolépticas, como el aroma o el sabor. Así, si bien no nos enfermaremos por beber un té bien conservado que tiene dos años, es muy probable que su sabor y su aroma no sea el mismo que cuando se elaboró.

tetera roja con taza

Diferencias en distintos tipos de tés

En líneas generales, los tés menos oxidados se conservan peor que los más oxidados. De este módo, tés como los blancos y verdes aguantan peor el paso del tiempo que los negros.

Otro tipo de tés que no envejecen bien son los aromatizados, que pierden muchos de sus matices.

Por lo tanto, si deseamos apreciar todo el carácter de un té determinado, especialmente si es de una variedad poco procesada (poco oxidada y no fermentada), es conveniente tomarlo dentro de su fecha de consumo recomendada. A medida que pasa el tiempo, el té se transforma y adquiere sabores más diferentes, a veces amaderados y terrosos.

¿Cómo conservar el té adecuadamente?

En cuanto a la conservación, no hay diferencias según la variedad del té escogida, salvo en el caso de los tés poco oxidados y cocidos al vapor, como es el caso de los tés verdes japoneses

Hay una regla básica a tener en cuenta para conservar bien un té: encontrar un sitio fresco, seco y oscuro.

Luego, es necesario analizar la variedad y la cantidad de té a conservar. Debemos tener en cuenta que no es lo mismo conservar un té blanco que un té negro, ni tampoco 20 gramos que 2 kilos, ni mucho menos bolsas de té que té a granel.

Conservación de bolsas de té

¿Es cierto que la luz solar, los olores de la cocina (o la alacena) y la humedad pueden causar estragos en las bolsas de té? Sí, es cierto.

Habitualmente, solemos creer que al estar empaquetadas, las bolsas de té no requieren cuidado alguno. De esta manera, las infusionamos, muchas veces, sin prestar atención al tiempo ni a la temperatura y, mucho menos, consideramos cómo las conservamos.

Lo cierto es que las bolsas de té deben guardarse dentro del envase del fabricante cerrado y en un lugar fresco, oscuro y lejos de otras fuentes aromáticas, como las especias.

Conservación del té a granel

Mantener en buenas condiciones el té a granel supone un esfuerzo extra. En el caso de que tengamos un paquete cerrado de té que deseamos conservar, lo ideal es guardarlo tal cual está; es decir que se recomienda evitar el cambio de recipiente. Pensemos que el paquete preparado por el vendedor tiene las características necesarias para mantener en buenas condiciones las hojas del té.

Solamente en el caso de que las hojas de té no estén bien empacadas, podemos optar por colocarlas en un recipiente diferente. Así, se recomienda utilizar en un recipiente hermético y opaco de cerámica, madera o lata. Tengamos en cuenta que la hermeticidad es fundamental para evitar que otros olores contaminen nuestro té. Una vez preparado el recipiente, el té debe almacenarse en un sitio oscuro, fresco y sin humedad.

¿Podemos guardar el té en la nevera?

No se recomienda guardar las hojas de té en la nevera, salvo en el caso de los tés poco oxidados y que han sido sometidos a procesos de vaporización, como el té verde japonés. 

Si tuviésemos un kilo de sencha, lo ideal sería guardarlo en diferente paquetes de menor tamaño e ir retirando de a uno de la nevera al momento de consumir.

Muy importante: una vez retiramos el té de la nevera, no deberíamos volver a guardarlo en frío sino consumirlo con brevedad.

Conservar el té adecuadamente no es tan difícil como podríamos pensar en un primer momento; tan solo requiere de un poco de cuidado y planificación. De cualquier manera, debemos estar preparados para aceptar las variaciones de aroma y sabor de un té cuando lo conservamos durante largos periodos de tiempo. Así que la próxima vez que bebas un té que tienes guardado hace tiempo, prepárate para descubrir sus nuevos matices.


Antonella Grandinetti
Antonella Grandinetti

Redactora creativa todoterreno y mamá por tres. Disfruto leyendo y escribiendo desde artículos hasta novelas. Me apasiona viajar y pasar tiempo soñando despierta con mis peques. Amante del mate y el té.

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