El hinojo es una de las plantas más utilizadas por la medicina natural. De hecho, hace cientos de años que se usa para tratar diversas afecciones como la indigestión, la inapetencia y la acidez.
Particularmente, la medicina ayurvédica prepara una infusión de hinojo con fines curativos. Como norma general, se recomienda infusionar 25 gramos de semillas de hinojo en medio litro de agua. En este caso, se lleva el agua casi al punto de ebullición y se incorporan las semillas que deben dejarse reposar durante unos 5 minutos, controlando que el agua se mantenga caliente pero sin hervir. Luego, se apaga el fuego y se deja infusionar otros tres minutos, para después colar y beber.
Ya hemos hablado en numerosas ocasiones de las propiedades de varias infusiones para mejorar problemas relacionados con la digestión o los gases. El hinojo es una de ellas. Sin embargo, sus propiedades curativas llegan mucho más allá. Acompáñanos a descubrirlas.
El hinojo es originario del Mediterráneo, aunque puede encontrarse en diferentes áreas templadas de todo el mundo, la planta Foeniculum vulgare puede crecer hasta alcanzar los dos metros de altura. Por supuesto, existen diversas variedades de esta planta (hinojo Carmo, Pollux, Genio, de Florencia…) pero todas ellas poseen propiedades largamente utilizadas para mejorar la salud y aliviar los síntomas de diversos malestares.
Más allá de sus usos medicinales, el hinojo es ampliamente utilizado en la gastronomía. Sus semillas sirven como hierba aromática en toda clase de aliños, encurtidos y salsas, mientras que su bulbo se cocina como una hortaliza, por ejemplo formando parte del famoso plato andaluz habichuelas con hinojo. También en la gastronomía francesa o india se usa como ingrediente en platos emblemáticos como la lubina a la provenzal o el Garam Masala.
El principal uso del hinojo en la historia ha sido mejorar algunos problemas digestivos comunes como la acidez, las malas digestiones o la inapetencia, además del exceso de gases (1).
Al ser rico en fibra, se considera una buena solución para prevenir el estreñimiento ya sea ocasional o crónico. El consumo de la infusión de hinojo también suele recomendarse para eliminar los cólicos. En este caso, se aconseja combinarlo con manzanilla para aprovechar sus efectos relajantes.
Lo mejor del hinojo es la posibilidad de consumir tanto la propia planta como sus semillas. Si bien al preparar la infusión lo hacemos con las semillas, es interesante que puedes cocinar el bulbo como hortaliza para toda clase de platos.
La Fundación Española de la Nutrición señala que el hinojo cuenta con 3 gramos de fibra por cada 100 gramos comestibles (2). Sabiendo la importancia que la fibra, así como otros nutrientes también presentes en esta planta como el magnesio y el potasio, tienen para la salud cardíaca, podríamos decir que beber esta infusión nos ayudaría a proteger nuestro corazón.
Además, su contenido de polifenoles le otorgaría una acción antioxidante. Recordemos que los antioxidantes combaten a los radicales libres, ayudando a proteger el organismo contra enfermedades, entre ellas las cardiovasculares (3).
Los cálculos renales son depósitos duros que se forman dentro de los riñones, de hecho se los conoce habitualmente como piedras.
La medicina popular atribuye al hinojo propiedades para eliminar estas piedras. Sin embargo, a día de hoy no existe suficiente evidencia científica sobre el tema.
Concretamente, un estudio publicado por Harvard Health Publishing (4) sugiere que el consumo habitual y regular de alimentos ricos en fibra ayudaría a regular el colesterol, uno de los principales marcadores de riesgo de enfermedades cardiovasculares. Citando el contenido de fibra del hinojo que ya hemos mencionado, ¿a qué esperas para preparar tu infusión?
La infusión de hinojo es utilizada por la medicina natural para combatir diferentes problemáticas respiratorias que van desde la tos hasta la bronquitis y el asma. Su acción antiespasmódica ayudaría a que los bronquios se relajen, permitiendo la expectoración y mejorando los síntomas (5).
Muchas especialistas en lactancia recomiendan incluir la infusión de hinojo en la dieta habitual de las madres lactantes ya que, según señalan diferentes estudios, ayuda a aumentar la producción de la leche materna (6).
Principalmente, se usa para aliviar los molestos cólicos menstruales. Se dice que beber una infusión de hinojo durante la regla, ayudaría a aliviar la inflamación y el dolor (7).
El hinojo aporta fibra a la dieta y esta, brinda sensación de saciedad.
Al ingerir fibra a través de los alimentos y bebidas, ayudamos a nuestro cuerpo a sentirse lleno. Esto sucede porque al mezclarse la fibra con los jugos gástricos, la misma se hincha, ocupando el espacio a su alrededor y ayudando a minimizar la ingesta de más alimentos (8).
Más allá de su actividad antioxidante, el hinojo aporta vitamina C, un componente fundamental para aumentar las defensas del sistema inmunológico. Además, esta vitamina combinada con calcio mejoraría la densidad ósea (9), a la vez que es esencial para lograr la correcta absorción del hierro (10). Recuerda que la deficiencia de este último mineral puede generar anemia.
Como ves, preparar una infusión de hinojo en casa podría no solamente ser una buena opción para combatir el frío y sentirnos reconfortados por dentro sino también como método preventivo o combativo de diversas molestias. ¿Ya has puesto a hervir el agua?
Fuentes:
Redactora creativa todoterreno y mamá por tres. Disfruto leyendo y escribiendo desde artículos hasta novelas. Me apasiona viajar y pasar tiempo soñando despierta con mis peques. Amante del mate y el té.
