Milky Oolong: el té más cremoso

Antonella Grandinetti
Antonella Grandinetti
Milky Oolong: el té más cremoso

¿Has oído hablar alguna vez del Milky Oolong? En China, lo llaman Nai Xiang, cuya traducción sería algo así como «aroma a leche». Se trata de un té suave, cremoso, ideal para quienes disfruten de las infusiones reconfortantes y que quedan en el paladar.

Si deseas saber más sobre el Milky Oolong, incluyendo cómo nació, cómo se prepara y todos sus secretos, ¡continúa leyendo!

¿Qué es el Milky Oolong?

Como su nombre indica, estamos hablando de un té azul (oolong) con cierto sabor lácteo. Esto no significa que se mezcle con leche ni con otros lácteos, como la nata, sino que sencillamente se aromatiza durante el proceso de elaboración.

Historia y elaboración de Milky Oolong

Cuenta la leyenda que hace muchos años, la luna se enamoró de un cometa pero este se estrelló contra la Tierra. La luna se puso tan triste que envió una ola de frío al lugar donde se había estrellado su amor.

Cuando al día siguiente los recolectores de té fueron a trabajar, se encontraron con que las hojas estaban a muy baja temperatura, casi congeladas. Las recogieron y las fermentaron, ansiosos por ver el sabor que obtendrían.

Tanta era su ansiedad que cortaron el proceso a la mitad, motivo por el que el Milky oolong es un té semifermentado.

Ahora bien, más allá de las leyendas, sabemos que esta variedad de té se produce en la provincia de Fujian, en China, en pequeñas cantidades, ya que su elaboración se lleva a cabo de manera manual.

Tras la recolección de las hojas, su marchitación y breve fermentación, estas se someten aún húmedas a un proceso de cocción al vapor. No obstante, en este caso, el vapor se desprende de una mezcla de leche y agua calentada sobre una hoguera.

De esta manera, «se mata el verde»  (se detiene la oxidación) y, a su vez, se le otorgan notas cremosas al té. Una vez cocidas, acción que ayuda a que el profundo verde de las hojas se conserve, las mismas son enrolladas a mano en forma de bolitas y, posteriormente, secadas.

Este tratamiento especial le otorga a las hojas un aroma y un sabor muy particular. Así, nace el Milky oolong, un curioso té azul con un sabor delicioso.

cuenco minúsculo de té

El sabor del Milky oolong

Este té destaca por su personalidad. Tiene un sabor dulce y floral, donde destacan los toques de orquídea, con una textura que se nota cremosa en el paladar. Llama la atención que al tragar la infusión se sienten unas notas frescas que recuerdan a hierbas. Sin dudas, el Milky Oolong es un té especial, perfecto para los grandes teteros.

Cómo preparar una taza perfecta de Milky oolong

Como suele suceder con el té, no hay una opinión unánime sobre la mejor forma de preparar Milky Oolong. Algunos expertos sugieren calentar el agua y sumergir las hojas durante 10 o 15 segundos, antes de iniciar la verdadera infusión. Así, las hojas se prepararían para desprender todo su sabor, aromas y propiedades.

No obstante, otros expertos insisten en que esto no es necesario. Nuestra recomendación es que pruebes con el remojado previo  y sin el mismo, y escojas luego la versión que más te haya gustado porque, como ya te hemos dicho, tu taza de té tiene que ser perfecta para ti, más allá de lo que expliquen los especialistas.

Presta atención a estas recomendaciones:

  1. Calienta el agua a 80ºC. Es muy importante que utilices un termómetro (si tienes) para evitar quemar las hojas. Si utilizas agua demasiado caliente, las hojas pueden desprender demasiados taninos y amargar la infusión.
  2. Apaga el fuego.
  3. Incorpora las hojas de Milky Oolong, siguiendo las indicaciones del fabricante en lo referido a cantidades.
  4. Infusiona durante 3 minutos.
  5. Cuela y sirve.

Ten en cuenta que el Milky Oolong es un té con sabor cremoso que recuerda a la leche, con lo cual no se recomienda incorporar leche a la infusión. Al tener un sabor dulzón, tampoco sería recomendable agregar azúcar ni miel para no enmascarar sus verdaderos matices.

Nota: Recomendamos retirar las hojas con cuidado, ya que es posible reinfusionarlas hasta tres veces. Por supuesto, el segundo y el tercer infusionado darán lugar a bebidas más ligeras.

Anímate a degustar el Milky Oolong. Te enamorarás de un sabor único y diferente, difícilmente comparable a cualquier otra infusión que hayas probado.

Antonella Grandinetti
Antonella Grandinetti

Redactora creativa todoterreno y mamá por tres. Disfruto leyendo y escribiendo desde artículos hasta novelas. Me apasiona viajar y pasar tiempo soñando despierta con mis peques. Amante del mate y el té.

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